
Cuando fallece un ser querido, uno de los primeros pasos es organizar el servicio funerario. En ese momento es habitual escuchar dos términos: funeraria y tanatorio. Aunque a veces se usan como sinónimos, no son lo mismo. Comprender la diferencia entre funeraria y tanatorio es clave para tomar decisiones correctas, optimizar recursos y garantizar que la despedida de nuestro ser querido sea un homenaje respetuoso y digno.
En este artículo exploraremos sus diferencias en funciones, ubicación, horarios y servicios, además de cómo se coordinan y qué criterios pueden ayudarte a elegir.
Diferencias generales entre funeraria y tanatorio
Aunque ambas forman parte del proceso funerario, su función principal no es idéntica.
Funciones principales
La funeraria es la empresa que gestiona todos los aspectos relacionados con el servicio funerario. Se encarga de la recogida del cuerpo, el acondicionamiento, los trámites administrativos y la organización de la ceremonia. También actúa como enlace entre la familia y otras entidades, como el cementerio, el crematorio o las autoridades civiles y religiosas.
El tanatorio, en cambio, es el lugar físico donde se vela al fallecido y donde familiares y amigos pueden reunirse para despedirse. No todas las funerarias tienen tanatorio propio, y no todos los tanatorios son gestionados por funerarias. En algunos casos, el tanatorio funciona como instalación independiente que presta servicios a distintas funerarias.
Ubicación
Las funerarias pueden tener oficinas en el centro de la ciudad o cerca de hospitales y cementerios. Los tanatorios suelen estar situados en zonas accesibles, con espacios amplios y aparcamiento. Algunos están próximos a cementerios, lo que facilita la logística del entierro o cremación.
Horarios
Las funerarias trabajan habitualmente las 24 horas, dado que el fallecimiento puede ocurrir en cualquier momento. El tanatorio, aunque también puede estar disponible de forma ininterrumpida, organiza su horario de visitas y salas de velatorio según la familia y la normativa local. En muchos casos, la funeraria coordina directamente la disponibilidad de la sala para adaptarse a las necesidades de la familia.
Diferencias entre funeraria y tanatorio en cuanto a servicios
Más allá de la ubicación y la función, la diferencia entre funeraria y tanatorio se refleja claramente en el tipo de servicios que cada uno ofrece.
Servicios de una funeraria
La funeraria ofrece un servicio integral que puede incluir:
- Traslado del fallecido desde el lugar del fallecimiento hasta el tanatorio, cementerio o crematorio.
- Preparación y acondicionamiento del cuerpo (tanatopraxia y tanatoestética).
- Asesoramiento y gestión de trámites legales, como certificados de defunción o licencias de enterramiento.
- Coordinación de la ceremonia religiosa o laica.
- Suministro del ataúd o urna funeraria.
- Publicación de esquelas y recordatorios.
- Apoyo y acompañamiento a la familia durante todo el proceso.
En algunas funerarias, estos servicios se complementan con asistencia psicológica para familiares o con ayuda en la gestión de herencias y seguros.
Servicios de un tanatorio
El tanatorio ofrece un espacio adecuado para el velatorio, así como comodidades para los familiares y asistentes:
- Salas de velatorio privadas y acondicionadas.
- Capillas o salas para ceremonias.
- Zonas de descanso y cafetería.
- Servicios de floristería.
- Aparcamiento.
- Áreas adaptadas para personas con movilidad reducida.
Si quieres saber cuánto cuesta un tanatorio, dependerá de los servicios que elijas.

La importancia de una coordinación adecuada entre funeraria y tanatorio
La experiencia de la familia depende en gran medida de la coordinación entre ambos. Si la funeraria y el tanatorio son gestionados por la misma empresa, la comunicación y la logística suelen ser más fluidas. Sin embargo, si se contratan por separado, es esencial asegurarse de que los horarios, el traslado del cuerpo y los servicios complementarios estén alineados.
Por ejemplo, un buen trabajo conjunto evita retrasos en el acondicionamiento del cuerpo o problemas con la disponibilidad de la sala de velatorio. En Aurens, la coordinación es una prioridad para garantizar que la despedida se desarrolle con respeto y sin contratiempos.
¿Cómo elegir entre funeraria y tanatorio?
La elección depende de las necesidades y circunstancias de cada familia. Algunos puntos a considerar:
- Tipo de servicio: Si quieres un servicio completo, es más cómodo contratar una funeraria que disponga de tanatorio propio, ya que simplifica la comunicación.
- Ubicación: Escoge un tanatorio cercano al lugar de residencia de la familia o con buena accesibilidad. Un tanatorio bien ubicado facilita la asistencia de amigos y familiares.
- Instalaciones: Valora si el tanatorio cuenta con las comodidades necesarias para los asistentes, como salas amplias, zonas de descanso o aparcamiento.
- Presupuesto: Compara opciones y revisa qué incluye cada servicio. A veces, contratar ambos servicios con la misma empresa puede suponer un ahorro.
- Confianza: Opta por empresas con buena reputación y experiencia. La tranquilidad que ofrece un servicio profesional y humano es fundamental.
Si buscas instalaciones que reúnan todas las comodidades, el tanatorio de Ibiza es un buen ejemplo de espacio pensado para facilitar la despedida.

Preguntas frecuentes sobre las diferencias entre funeraria y tanatorio
¿Es obligatorio contratar tanto la funeraria como el tanatorio, o se pueden contratar por separado?
No es obligatorio contratar ambos servicios con la misma empresa. Puedes contratar la funeraria con una compañía y el tanatorio con otra. Sin embargo, hacerlo con la misma entidad puede facilitar la coordinación y reducir gestiones.
¿Puedo elegir el tanatorio en una ciudad diferente a la de la funeraria?
Sí. Puedes seleccionar un tanatorio en una ciudad distinta, siempre que la funeraria pueda gestionar el traslado del cuerpo. Este servicio suele implicar un coste adicional, y conviene confirmarlo con antelación para evitar contratiempos.
¿El tanatorio realiza los trámites administrativos o lo hace la funeraria?
Normalmente, la funeraria es la que gestiona los trámites administrativos, como la obtención del certificado de defunción o la licencia de enterramiento. El tanatorio se centra en proporcionar el espacio y los servicios asociados al velatorio.